México es el país mas hermoso
Tiene la mejor gente y los paisajes más
lindos.
Posee todos los climas, biodiversidad,
La tierra más
productiva.

Estratégica posición geográfica,
Potencial
hídrico,
Pulmones para el mundo
Leyes e historia
propias.

Necesitamos formas al mexicano del futuro:
Más
preparado en lo intelectual,
Más productivo en lo económico,
Más solidario
en la comunidad.

Debemos hacer que todo mexicano,
Se sienta
orgulloso de su país.

Tenemos que construir el alma de la
patria,
Bajo la protección de Dios.

¡Berries en tu jardín!

¿Has pensado en tener tus propias berries? ¡Piensalo! Poder cosechar frambuesas, fresas, zarzamoras, moras en tu propio jardín, a un bajo precio, sería ¡genial!...Si estas interesado, nosotros te ofrecemos planta de:


-Frambuesa: 30 pesos
-Bluberry: 65 pesos
-Cerezo: 350 pesos
-Zarzamora: 30 pesos
-Fresa: 30 pesos
-Ciruela: 60 pesos
-Etc.








miércoles, 7 de abril de 2010

Sustentabilidad y agricultura a traspatio


¿Qué queremos decir con ser sustentable?

Escuchamos y leemos mucho esta palabra últimamente, y en definitiva es a lo que tenemos que llegar. Ya que de esto depende la continuidad de la vida en la tierra y de la misma tierra.

Que algo sea sustentable significa, que pueda ser aprovechado, disfrutado, trabajado y admirado, no solamente hoy, sino también en un futuro, en armonía tanto en el tiempo como en el espacio.

Y en esto debe de existir un equilibrio entre: los ecológico, lo económico y lo social; ya que todo tiene que funcionar de manera equilibrada para que pueda perpetuarse. En nuestras actividades debemos respetar la naturaleza adaptándonos a ella sin destruirla, y esto a la vez nos debe permitir mantenernos en forma económica y en equidad social, de manera que nosotros también podamos sustentarnos en el tiempo. Ser observadores de nuestro entorno, nos permite darnos cuenta de las cosas que ayudan y las que definitivamente perjudican este proceso. Es muy importante empezar por uno mismo, en la casa, con la familia y hacerlo un habito en las pequeñas cosas como el manejo de la basura, ahorro en el agua, energía, papel, respeto a la vida, al prójimo, el ser concientes de lo que comemos, si perjudica el medio ambiente o no. Ser consumidores responsables, pero también ser empleados y empresarios responsables, nuestro ejemplo educara y enseñara a otros a hacer lo mismo, creemos que esta es la verdadera forma de lograr un cambio.

Hay mucho por hacer y es necesario que todo esto se tome muy enserio por autoridades y gobiernos, pero mientras tanto nuestra conducta es mucho más importante.

Construir nuestro huerto orgánico en casa tiene mucho que ver con todo esto en mucho aspectos. Desde el primer momento estamos observando la naturaleza y analizando como podemos adaptarnos a ella sin invadirla y disfrutar de nuestros beneficios. Trabajamos la tierra tomando conciencia de que estamos trabajando con la vida misma.

Tratamos de respetar todas las especies animales y vegetales del entorno, para así mantener a diversidad, y por tanto el equilibrio del ecosistema. Esto tiene grandes beneficios ya que se produce un autocontrol de plagas y malezas al coexistir diversas especies.

Es muy difícil que un monocultivo pueda mantener un equilibrio ya que no esta de acuerdo con la expresión de la diversidad de la naturaleza, y es lógico que ese ecosistema sea mas inestable y susceptible al ataque masivo de plagas y malezas. Es por eso que la agricultura convencional necesita de ayuda externa para intentar mantener en ese equilibrio, por eso el uso de indiscriminado de agroquímicos para contrarrestarlas.

El problema de los agroquímicos como por ejemplo insecticidas, fungicidas, herbicidas, etc. Es que son peligrosos para la supervivencia de distintas especies, no solo la afectada, también el suele, el agua, los animales y el ser humano.

Aun la agricultura orgánica extensiva, al trabajar con monocultivos necesita la ayuda de insumos externos, para mantener el equilibrio del ecosistema, aunque estos insumos son utilizados como ultimo recurso y son de origen natural, por lo que son mejor asimilados por el ecosistemas e inocuos para la salud.

Hacer un cultivo orgánico es un gran paso, usando sistemas de siembra, rotación y asociación de cultivos mejora la estructura y fertilidad de la tierra, por lo tanto la salud de ese ecosistema va a resistir ataque de plagas, malezas, inclemencias del clima, y utilizando como ultimo recurso productos naturales de mejoramientos y control que no contaminan y no intoxican.

Finalmente el intentar ser sustentable es todavía un paso mas allá, trabajamos para que por generaciones haya suelo fértil, agua, y especies diversas para cultivas y coexistir, que haya un planeta saludable en el cual vivir y que haya suficiente para todos.

Carta del Gran Jefe Seattle

El presidente de los Estados Unidos, Franklin Pierce, envía en 1854 una oferta al jefe Seattle, de la tribu Suwamish, para comprarle los territorios del noroeste de los Estados Unidos que hoy forman el Estado de Wáshington. A cambio, promete crear una "reservación" para el pueblo indígena. El jefe Seattle responde en 1855.

El Gran Jefe Blanco de Wáshington ha ordenado hacernos saber que nos quiere comprar las tierras. El Gran Jefe Blanco nos ha enviado también palabras de amistad y de buena voluntad. Mucho apreciamos esta gentileza, porque sabemos que poca falta le hace nuestra amistad. Vamos a considerar su oferta pues sabemos que, de no hacerlo, el hombre blanco podrá venir con sus armas de fuego a tomar nuestras tierras. El Gran Jefe Blanco de Wáshington podrá confiar en la palabra del jefe Seattle con la misma certeza que espera el retorno de las estaciones. Como las estrellas inmutables son mis palabras.


¿Cómo se puede comprar o vender el cielo o el calor de la tierra? Esa es para nosotros una idea extraña.

Si nadie puede poseer la frescura del viento ni el fulgor del agua, ¿cómo es posible que usted se proponga comprarlos?

Cada pedazo de esta tierra es sagrado para mi pueblo. Cada rama brillante de un pino, cada puñado de arena de las playas, la penumbra de la densa selva, cada rayo de luz y el zumbar de los insectos son sagrados en la memoria y vida de mi pueblo. La savia que recorre el cuerpo de los árboles lleva consigo la historia del piel roja.

Los muertos del hombre blanco olvidan su tierra de origen cuando van a caminar entre las estrellas. Nuestros muertos jamás se olvidan de esta bella tierra, pues ella es la madre del hombre piel roja. Somos parte de la tierra y ella es parte de nosotros. Las flores perfumadas son nuestras hermanas; el ciervo, el caballo, el gran águila, son nuestros hermanos. Los picos rocosos, los surcos húmedos de las campiñas, el calor del cuerpo del potro y el hombre, todos pertenecen a la misma familia.

Por esto, cuando el Gran Jefe Blanco en Wáshington manda decir que desea comprar nuestra tierra, pide mucho de nosotros. El Gran Jefe Blanco dice que nos reservará un lugar donde podamos vivir satisfechos. Él será nuestro padre y nosotros seremos sus hijos. Por lo tanto, nosotros vamos a considerar su oferta de comprar nuestra tierra. Pero eso no será fácil. Esta tierra es sagrada para nosotros. Esta agua brillante que se escurre por los riachuelos y corre por los ríos no es apenas agua, sino la sangre de nuestros antepasados. Si les vendemos la tierra, ustedes deberán recordar que ella es sagrada, y deberán enseñar a sus niños que ella es sagrada y que cada reflejo sobre las aguas limpias de los lagos hablan de acontecimientos y recuerdos de la vida de mi pueblo. El murmullo de los ríos es la voz de mis antepasados.

Los ríos son nuestros hermanos, sacian nuestra sed. Los ríos cargan nuestras canoas y alimentan a nuestros niños. Si les vendemos nuestras tierras, ustedes deben recordar y enseñar a sus hijos que los ríos son nuestros hermanos, y los suyos también. Por lo tanto, ustedes deberán dar a los ríos la bondad que le dedicarían a cualquier hermano.

Sabemos que el hombre blanco no comprende nuestras costumbres. Para él una porción de tierra tiene el mismo significado que cualquier otra, pues es un forastero que llega en la noche y extrae de la tierra aquello que necesita. La tierra no es su hermana sino su enemiga, y cuando ya la conquistó, prosigue su camino. Deja atrás las tumbas de sus antepasados y no se preocupa. Roba de la tierra aquello que sería de sus hijos y no le importa.

La sepultura de su padre y los derechos de sus hijos son olvidados. Trata a su madre, a la tierra, a su hermano y al cielo como cosas que puedan ser compradas, saqueadas, vendidas como carneros o adornos coloridos. Su apetito devorará la tierra, dejando atrás solamente un desierto.

Yo no entiendo, nuestras costumbres son diferentes de las suyas. Tal vez sea porque soy un salvaje y no comprendo.

No hay un lugar quieto en las ciudades del hombre blanco. Ningún lugar donde se pueda oír el florecer de las hojas en la primavera o el batir las alas de un insecto. Mas tal vez sea porque soy un hombre salvaje y no comprendo. El ruido parece solamente insultar los oídos.

¿Qué resta de la vida si un hombre no puede oír el llorar solitario de un ave o el croar nocturno de las ranas alrededor de un lago?. Yo soy un hombre piel roja y no comprendo. El indio prefiere el suave murmullo del viento encrespando la superficie del lago, y el propio viento, limpio por una lluvia diurna o perfumado por los pinos.

El aire es de mucho valor para el hombre piel roja, pues todas las cosas comparten el mismo aire -el animal, el árbol, el hombre- todos comparten el mismo soplo. Parece que el hombre blanco no siente el aire que respira. Como una persona agonizante, es insensible al mal olor. Pero si vendemos nuestra tierra al hombre blanco, él debe recordar que el aire es valioso para nosotros, que el aire comparte su espíritu con la vida que mantiene. El viento que dio a nuestros abuelos su primer respiro, también recibió su último suspiro. Si les vendemos nuestra tierra, ustedes deben mantenerla intacta y sagrada, como un lugar donde hasta el mismo hombre blanco pueda saborear el viento azucarado por las flores de los prados.

Por lo tanto, vamos a meditar sobre la oferta de comprar nuestra tierra. Si decidimos aceptar, impondré una condición: el hombre blanco debe tratar a los animales de esta tierra como a sus hermanos.

Soy un hombre salvaje y no comprendo ninguna otra forma de actuar. Vi un millar de búfalos pudriéndose en la planicie, abandonados por el hombre blanco que los abatió desde un tren al pasar. Yo soy un hombre salvaje y no comprendo cómo es que el caballo humeante de hierro puede ser más importante que el búfalo, que nosotros sacrificamos solamente para sobrevivir.

¿Qué es el hombre sin los animales? Si todos los animales se fuesen, el hombre moriría de una gran soledad de espíritu, pues lo que ocurra con los animales en breve ocurrirá a los hombres. Hay una unión en todo.

Ustedes deben enseñar a sus niños que el suelo bajo sus pies es la ceniza de sus abuelos. Para que respeten la tierra, digan a sus hijos que ella fue enriquecida con las vidas de nuestro pueblo. Enseñen a sus niños lo que enseñamos a los nuestros, que la tierra es nuestra madre. Todo lo que le ocurra a la tierra, le ocurrirá a los hijos de la tierra. Si los hombres escupen en el suelo, están escupiendo en sí mismos.

Esto es lo que sabemos: la tierra no pertenece al hombre; es el hombre el que pertenece a la tierra. Esto es lo que sabemos: todas la cosas están relacionadas como la sangre que une una familia. Hay una unión en todo.

Lo que ocurra con la tierra recaerá sobre los hijos de la tierra. El hombre no tejió el tejido de la vida; él es simplemente uno de sus hilos. Todo lo que hiciere al tejido, lo hará a sí mismo.

Incluso el hombre blanco, cuyo Dios camina y habla como él, de amigo a amigo, no puede estar exento del destino común. Es posible que seamos hermanos, a pesar de todo. Veremos. De una cosa estamos seguros que el hombre blanco llegará a descubrir algún día: nuestro Dios es el mismo Dios.

Ustedes podrán pensar que lo poseen, como desean poseer nuestra tierra; pero no es posible, Él es el Dios del hombre, y su compasión es igual para el hombre piel roja como para el hombre piel blanca.

La tierra es preciosa, y despreciarla es despreciar a su creador. Los blancos también pasarán; tal vez más rápido que todas las otras tribus. Contaminen sus camas y una noche serán sofocados por sus propios desechos.

Cuando nos despojen de esta tierra, ustedes brillarán intensamente iluminados por la fuerza del Dios que los trajo a estas tierras y por alguna razón especial les dio el dominio sobre la tierra y sobre el hombre piel roja.

Este destino es un misterio para nosotros, pues no comprendemos el que los búfalos sean exterminados, los caballos bravíos sean todos domados, los rincones secretos del bosque denso sean impregnados del olor de muchos hombres y la visión de las montañas obstruida por hilos de hablar.

¿Qué ha sucedido con el bosque espeso? Desapareció.


¿Qué ha sucedido con el águila?Desapareció.


La vida ha terminado. Ahora empieza la supervivencia.